El lector de huellas dactilares es una solución de seguridad que emplea tres técnicas para identificar de manera exclusiva a una persona que intenta acceder a datos protegidos y permitirle o denegarle el acceso, en función de la identidad de la persona.
El lector de huellas dactilares incluye un sensor. La persona que desea autenticarse a través del lector de huellas dactilares empieza el proceso colocando un dedo en el sensor. El sensor toma las medidas de la capa de piel viva situada debajo de la superficie (ya que el lector de huellas dactilares emplea un sensor de subsuperficie). El sensor de subsuperficie no se ve afectado por cicatrices, suciedad o partículas existentes en la superficie del dedo. De este modo, el lector de huellas dactilares puede identificar correctamente a una persona siempre que ésta pase el dedo, con independencia de los cambios que se hayan producido en la superficie del dedo.